viernes, 30 de noviembre de 2007

el cruce...
















Dicen que una imagen vale más que mil palabras. Hay imágenes que hablan mucho. Acá les presento una foto que me envió María Clara: una imagen que ella encontró en el pueblo de Chimpay, Río Negro, tierra donde nació Ceferino. Remite a momentos de la historia de nuestro país, unos lejanos en el tiempo y otros no tanto...Ofrece muchísimas posibilidades de lectura...Los invito a compartirlas, a transformar la imagen en palabras.

viernes, 23 de noviembre de 2007

una frase...

Cualquiera que se olvida de la hora cuando usa un ordenador conoce la propensión a soñar, la urgencia de hacer realidad sus sueños y la tendencia a perder la hora de comida.

Tim Berners-Lee

sábado, 27 de octubre de 2007

domingo, 21 de octubre de 2007

Guía de aves

Para los curiosos observadores de la naturaleza, recomiendo esta Guía de aves silvestres de la Facultad de Agronomía de la UBA. Es muy fácil de seguir y útil para los que quieren iniciarse en el reconocimiento de especies que habitan en la Ciudad de Buenos Aires.
Aquí va la invitación: http://www.agro.uba.ar/aves/principal.htm

sábado, 20 de octubre de 2007

Un buen guiso

Un buen guiso cuenta con variados ingredientes. En este caso, la olla va a ir proponoiendo temas de discusión especialmente los relacionados con el ambiente y la educación. Podrán aparecer otros condimentos, como comentarios sobre mascotas, plantas, viajes, recetas...

sábado, 13 de octubre de 2007

La piedra de hacer sopa


En un pequeño pueblo una mujer se llevó una gran sorpresa al ver que había llamado a su puerta un extraño correctamente vestido que le pedía algo de comer.
Lo siento -dijo ella-, pero ahora mismo no tengo nada en casa.
No se preocupe, dijo amablemente el extraño, tengo una piedra de sopa en mi cartera.
Si usted me permitiera echarla en una olla de agua hirviendo yo haría la más exquisita sopa del mundo. Consiga una olla muy grande por favor.
A la mujer le picó la curiosidad, puso la olla al fuego y fue a contar el secreto de la piedra a sus vecinas. Cuando el agua rompió a hervir, todo el vecindario se había reunido allí para ver a aquel extraño y su piedra de sopa.
El extraño dejó caer la piedra en el agua, luego probó una cuchara con verdadera delectación y exclamó: ¡Deliciosa! Lo único que necesita es unas cuantas papas.
- ¡¡Yo tengo unas papas en mi cocina!!- gritó una mujer.
Y en pocos minutos estaba de regreso con una gran fuente de papas peladas que fueron derecho a la sopa.
El extraño volvió a probar el brebaje: -¡Excelente! -dijo y añadió pensativamente:
- Si tuviéramos un poco de carne, haríamos un cocido más apetitoso.
Otra ama de casa salió zumbando y regresó con un pedazo de carne que el extraño, tras aceptarlo cortesmente, introdujo en el puchero. Cuando volvió a probar el caldo, puso los ojos en blanco y dijo:
- ¡Ah , qué sabroso! Si tuviéramos unas cuantas verduras, sería perfecto, absolutamente perfecto...
Una de las vecinas fue corriendo hasta su casa y volvió con una cesta llena de cebollas y zanahorias; después de introducir las verduras en el puchero, el extraño probó nuevamente la sopa y con tono autoritario dijo:
- La sal.
Aquí la tiene, le dijo la dueña de casa.
A continuación dio otra orden: ¡¡Platos para todo el mundo!!.
La gente se apresuró a ir a sus casas en busca de platos.
Algunos regresaron trayendo incluso pan y frutas.
Luego se sentaron todos a disfrutar de la espléndida comida, mientras el extraño repartía abundantes raciones de su increíble sopa.
Todos se sentían extrañamente felices mientras reían, charlaban y compartían por primera vez su comida. En medio del alborozo, el extraño se escabulló silenciosamente, dejando tras de si la milagrosa piedra de sopa, que ellos podrían usar siempre que quisieran hacer la más deliciosa sopa del mundo...
Cuento tradicional

los primeros ingredientes

Esta olla es para que cada uno aporte lo que tiene, mucho o poco, para compartir con todos.